Después de muchas especulaciones y expectativas, el 24 de diciembre del 2015 se publicó en el Diario Oficial de la Federación el Decreto por el cual se expide la Ley de Transición Energética (LTE) con la que se abrogan la Ley para el Aprovechamiento de Energías Renovables y el Financiamiento de la Transición Energética y la Ley para el Aprovechamiento Sustentable de la Energía, ambas de 2008.
La LTE se integra de 128 artículos distribuidos a lo largo de diez Títulos, así como 22 transitorios. En términos de la propia Ley, esta tiene por objeto regular el aprovechamiento sustentable de la energía así como las obligaciones en materia de energías limpias y de reducción de emisiones contaminantes de la industria eléctrica, manteniendo la competitividad de los sectores productivos.
Destaca de su contenido los siguientes aspectos:
• El establecimiento de obligaciones en materia de energías limpias, particularmente de quienes participen en el mercado eléctrico y los titulares de contratos legados, de contribuir al cumplimiento de las metas que se establezcan en la materia.
• Necesidad de establecer metas en materia de eficiencia energética y metas en el consumo de energía eléctrica.
• Sustitución gradual del uso de energías fósiles para la generación de electricidad.
• Obligación de la Secretaría de Energía (SENER) y otras dependencias de emitir disposiciones reglamentarias que detallen las acciones, instrumentos y mecanismos para el desarrollo eficiente de la generación de energía limpia.
• Referencia a la de metodología para determinación de externalidades (positivas y negativas) de las energías limpias.
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